Desde su fundación, en 1991, S.O.S. Familia ha centrado su atención y ha consagrado sus mejores esfuerzos en alertar a la opinión pública sobre los problemas de la televisión, especialmente en lo que se refiere a la protección de la infancia y de la juventud.
En esta sección os abstendremos de tratar con más profundidad los problemas concernientes a la televisión, una vez que, como dijimos, S.O.S. Familia ha difundido ya una substanciosa materia al respecto, que relacionamos en nota abajo, que el lector interesado podrá consultar[1] Enunciaremos apenas los principales efectos dañinos de la teleadicción, basados en nuestros estudios y los de innumerables trabajos científicos publicados sobre el tema.
A. Disconformidad de la opinión pública
Difícilmente encontraremos personas conformes con el nivel de las programaciones de la televisión. Difícilmente encontraremos quien se prive de verla y se sustraiga a su acción, que algunos llaman de hipnótica.
Con frecuencia, se oye mencionar que por detrás de la basura televisiva se mueven intereses económicos e ideológicos. Las conveniencias económicas son tan obvias que no es necesario comentar. Diremos apenas una palabra sobre los motivos ideológicos, dejando al lector que los juzgue.
Terminamos esta sección reproduciendo las recomendaciones prácticas que S.O.S. Familia, basándose en estudios de especialistas, difunde.
En España, en varias Comunidades Autónomas, se han aprobado las llamadas leyes de "Uniones de hecho" o de "Parejas de hecho" (Cataluña, Aragón, Navarra, Valencia, Madrid, Baleares, Asturias), y en otras, como Andalucía y País Vasco, se tramitan proyectos semejantes. Se programa aún extender su regulación a la legislación civil del Estado.
